Nació hace 91 años en Dinamarca, y desde entonces, varias generaciones han desarrollado la lógica y han mejorado la coordinación con estos ladrillitos de encaje adictivo. Las piezas de LEGO®, atajo de “Leg godt” (que significa “jugar bien” en danés), se utilizan incluso en talleres de terapia ocupacional para mejorar las capacidades del cerebro y la psicomotricidad, incluso cuando el deterioro cognitivo amenaza a la tercera edad. Está demostrado: la construcción de figuras de LEGO ayuda a fortalecer ciertas habilidades y destrezas, sobre todo en los niños que, a corta edad, tienen la capacidad de absorber conocimiento y, más si se hace a través del juego.