El próximo curso escolar en la Comunidad Valenciana seguirá marcado por las medidas extraordinarias provocadas por el Covid y en las que el Gobierno Valenciano va a invertir 40 millones de euros: profesorado extra, digitalización y refuerzo del servicio de comedor y limpieza, además de material de protección. Sin embargo, el foco de las prioridades ha cambiado. Si el curso pasado lo fue garantizar la seguridad y la máxima normalidad posible en las etapas de Infantil y Primaria, esta vez la mayor parte de los refuerzos se destinarán a Secundaria, Bachillerato y FP. Recuperar el 100% de presencialidad en la aulas en estas etapas es esencial después de que se haya demostrado que ha sido el talón de Aquiles del curso. Por eso, tal y como anunciaron ayer el conseller de Educación, Vicent Marzà, y el secretario autonómico, Miguel Soler, la inversión para garantizar la asistencia diaria de los alumnos a los centros en estas etapas será mayor. "Será un curso seguro, saludable y con un 100% de presencialidad en todas las etapas y niveles", destacó el conseller.
