Castilla y León mantendrá un sistema de calificación que permita tanto a profesores como a familias y alumnos identificar el grado de conocimiento adquirido pese a la supresión de las notas numéricas en Secundaria en el nuevo currículo escolar aprobado por el Gobierno de España.
Así lo ha afirmado la consejera de Educación, Rocío Lucas, tras tomar posesión de su cargo, en el que repite esta legislatura, y en el que ha insistido en que fuera de aquello que imponga la normativa estatal, la Junta de Castilla y León adoptará las medidas necesarias para "garantizar un sistema educativo de calidad".